En plena celebración PPera por el “No, pero Sí” del referéndum de Grecia y con un tercer rescate que parecía ya hecho, Merkel anuncia que va a ser difícil la inyección económica prometida a Tsipras, pese a que éste haya vendido su alma al diablo.
En Grecia se levanta el “castigo” bancario realizado por el banco central, aunque aquí nos vendan que ha sido el propio Tsipras . El corralito del terror le sirve al PP para seguir con su política del miedo de cara a las generales, con unas restricciones de 60€ al día en un pequeño país donde las nominas (de los pocos que trabajan) y las pensiones pueden ser retiradas íntegras en unos 10 días desde un cajero automático, debido a las cantidades miserables que allí se cobra.
El rescate definitivo para terminar de arruinar a los helenos aún no ha llegado ni tiene que ver con estos rescates del Eurogrupo, y aunque Syriza ya ha avisado que están obligados a recibir el último, todos los actores implicados saben que ni podrán aplicar al pie de la letra las medidas de devolución, ni pueden seguir asfixiando a un país que lleva en caída libre desde que empezaron los recortes del bipartidismo griego.
La solidaridad de la unión europea es tan miserable, que los cerca de 50 mil millones de euros irán destinados a pagar intereses, deuda, demoras y seguir rescatando a la banca, e intentar así que sus bancos no echen el cierre y dejen a sus clientes sin tu propio dinero.
¿Qué harán los Griegos cuando la Troika ordene abrir los bancos? Igual vuelven a rebelarse y en un acto de dignidad ciudadana le otorgan el castigo que se merece a esos bancos que han cerrado y escondido su dinero (muy al contrario de lo que sucede en España, que después del saqueo de Bankia, las preferentes, los patriotas Suizos, los rescates a la banca e incluso los muertos que ello ha arrastrado, se sigue confiando en los bancos, con una aparente normalidad).
Entrando a comparar a los electores de España y Grecia, no hay duda de quiénes están dispuestos a seguir arrodillados y quiénes prefieren morir con dignidad. En este juegos de espejos, salimos malparados.
Solo hay que observar los ejemplos de nuestra acción-reacción: Que en la España del Partido Popular se encarcela e imputa a todos sus ex tesoreros, ¡No pasa nada! Se sigue confiando el dinero a los mismos y son los partidos del cambio, quienes deben demostrar su honradez. Que hacen un corralito a los ahorros de los preferentistas, tampoco nos vamos a escandalizar por tan poco, y se continúa abriendo cuentas en los mismos bancos y domiciliando pensiones por un magnífico juego de sartenes. Que Rajoy lleva a referéndum la concesión de 10.000 millones para el rescate a Grecia, pues se vota que sí, aunque en su día no se sometiera a ninguna votación el rescate a la banca, aquella que Rajoy negó pero Montrolo ha confesado que si se pidió.
En la España de sueldos y condiciones laborales del sur de Europa, se sigue pensando que estamos a la cabeza de la economía o al menos eso se quiere hacer ver, a lectores y espectadores con sueldos de vergüenza y trabajos miserables, con tal de llevarse un puñado de votos en las elecciones generales.
¿Con qué otra argucia nos querrán tomar por tontos la próxima vez? ¿Querrán traer la playa hasta Madrid? ¿Seguirán utilizando Twitter para demonizar a los partidos del cambio? Cualquier ocurrencia es válida en la España de la manipulación y la mentira, que no se miran en un pueblo hermano ni sabe reconocerse, ante el espejo, que mañana podría verse en una situación parecida.
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2 Réplicas
Averroes
Yo creo que es más conveniente que explique el «no pero sí» de Tsipras. Y de Syriza. Eso sí que es una incongruencia. O mejor, una trampa saducea, una estafa del líder a los suyos. Y al pueblo griego. Tiene difícil explicación esa bajada de pantalones tan evidente. Por sus obras los conoceréis….
julio fernández
Cierto Averroes, razón no te falta.